
Definimos este concepto dentro de un sistema eléctrico de corriente alterna como la situación en la cual aparece un desequilibrio importante entre la carga y el generador.
Dentro de un sistema eléctrico, la frecuencia queda determinada por el numero de giros del generador (alternador) de la central de generación, cuya frecuencia nominal establecida es de 50Hz.
Valores de referencia:
En condiciones normales de operación, el valor promedio de la frecuencia fundamental en los sistemas de distribución, durante 10 seg, es según la EN 50.160:
Con conexión síncrona y sistema interconectado:
- 50Hz ± 1% (49,5 – 50,5 Hz) durante el 95% de una semana.
- 50Hz - 6%, + 4% (47 – 52 Hz) durante el 100% de una semana.
Con conexión asíncrona aislada de un sistema interconectado (sistemas de interconexión de ciertas islas):
- 50Hz ± 2% (49 – 51 Hz) durante el 95% de una semana.
- 50Hz ± 15% (42,5 – 57,5 Hz) durante el 100% de una semana.
Causas que originan la alteración:
En condiciones normales de funcionamiento la capacidad de generación de la central es superior al consumo de la carga, manteniendo siempre un equilibrio y margen de seguridad para compensar las variaciones bruscas de carga y mantener la frecuencia en los márgenes de tolerancia permitidos.
Cuando el consumo de la carga es superior a la capacidad de generación se produce una alteración negativa de la frecuencia. Si la disminución de la frecuencia excede los límites permitidos se produce un colapso en el sistema y las desconexiones temporales y selectivas de las cargas.
Cuando el consumo es menor a la generación se produce una alteración positiva de la frecuencia. Si el aumento de la frecuencia excede los límites permitidos se produce una disminución en la capacidad de generación de la central para adecuarla a la carga.